¿Estas interesado en iniciar tu propio negocio? Conoce los beneficios al iniciar este negocio, el mercado potencial y la mejor ubicación

    ¿POR QUE UN SALÓN DE UÑAS?

    De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos (Canipec), el valor total de la industria de cosméticos y artículos para el cuidado del hogar es de US $14,000 millones anuales. Por tanto, se trata de una buena oportunidad para quienes desean emprender. 

    Ofrecer los servicios de uñas de acrílico podrá parecer trillado; sin embargo, la innovación de esta idea de negocio consiste en crear diseños exclusivos, inspirados en tendencias como la impuesta por la actriz estadounidense Zooey Deschanel. Ella, junto con otras artistas jóvenes, optaron por llevar en las uñas formas que van desde simular un par de tenis hasta la recreación de un traje de hombre. 

    Poco a poco, las estéticas especializadas en la colocación y decoración de uñas de acrílico han invadido las ciudades y se multiplican a un ritmo acelerado. Expertos del sector calculan que en toda la República Mexicana existen por lo menos 10,000 salones exclusivos de uñas y más de 3,000 manicuristas independientes que no cuentan con un establecimiento fijo pero que ofrecen el servicio a domicilio. 

    Y es que unas manos bien cuidadas son la carta de presentación de la mujer moderna que trabaja y desea verse bien en todo momento. Esta necesidad ha dado paso a un negocio altamente redituable que puede alcanzar utilidades superiores al 100%. 

    Pero, ¿por qué el negocio es tan rentable? La respuesta está en el bajo costo de producción y la excesiva demanda de servicios de calidad. 

    Hoy, las manos y su arreglo forman parte de la personalidad y el estilo propios; de ahí que las clientas estén dispuestas a pagar más por cada diseño. Por eso, si tienes experiencia con la técnica de uñas de acrílico, eres creativo y tienes habilidad para el diseño, dibujo y pintura, este emprendimiento es para ti.

    FORMATOS DE NEGOCIO EXISTENTES

    En México, este nuevo concepto de estéticas se popularizó hace no más de 15 años en varias ciudades del norte del país y en el Distrito Federal, que trajeron el modelo de negocio de California, Florida y Texas. Hoy, al menos 15,000 mujeres en toda la República Mexicana recurren a este servicio una vez al mes. 

    Para destacar en un mercado competido, las premisas del negocio son: calidad, rapidez y durabilidad. Un salón de uñas debe garantizar a sus clientas que utiliza materiales de alta calidad, que realiza el trabajo en el menor tiempo posible con un servicio eficaz y que el trabajo permanecerá durante varias semanas. 

    Los distintos modelos de negocio que surgen a raíz de las demandas ya mencionadas son, ofrecer servicio a domicilio, servicio exprés, etc. 

    La ventaja de ofrecer servicio a domicilio es que te liberas de la renta de un local y la contratación de personal. Una buena opción es darle la oportunidad a tus clientas de hacer citas después de la hora de salida del trabajo o en fines de semana. Un servicio a domicilio básico cuesta $250.00, aunque el precio puede subir si el diseño es muy complicado. 

    Podrías complementar tus ingresos con otros servicios como venta de barnices, cursos básicos para mantener en buen estado las uñas, manicure y masajes. 

    En cuanto al servicio exprés, Investigaciones revelan que hoy, un 40% más de mujeres se arreglan las uñas que hace 10 años, y la mayoría de ellas son profesionistas que carecen de tiempo para realizarse un manicure profesional. 

    Existen muchos negocios dedicados a esta actividad. Sin embargo, todos ofrecen tratamientos de por lo menos una hora, ya que están enfocados a servicios muy completos y sofisticados. 

    Mientras esto funciona para un segmento, una gran parte del mercado no tiene el tiempo disponible para disfrutar de este tipo de tratamientos.

    Como el mercado meta serán mujeres y hombres ejecutivos, ten presente que los horarios en los cuales tendrás más afluencia serán antes y después del horario de oficina y las horas de comida.

    Aun cuando los modelos anteriores representan ventajas competitivas importantes el presente proyecto se centrara en el concepto tradicional de salón de uñas establecido en un local comercial, teniendo en cuenta que en un futuro la oferta puede contemplar el servicio exprés y a domicilio.

    QUIENES SERÁN TUS CLIENTES

    El segmento al que atiende un salón de uñas es tan diverso como las combinaciones de materiales y colores que se ofrecen en este negocio.

    Considera que el abanico de clientes está compuesto en un 99% de mujeres que rondan entre los 25 y 60 años, son económicamente activas, están interesadas por la moda y cuidan su apariencia. El 1% restante corresponde a los hombres que requieren del servicio de manicure. 

    Por otra parte, los hábitos de consumo se han ido modificando: 

    • Ha disminuido la edad a la que las personas comienzan a acudir a estos centros. 
    • Ha aumentado el número de hombres que acude a este tipo de establecimiento para recibir tratamientos , tal vez 1% te parezca poco, pero comparado con la posibilidad de que un hombre acudiera a un establecimiento como este hace unos años, es realmente representativo. 
    • Respecto al nivel económico, la disminución de los precios hace que hoy en día resulten asequibles para la mayor parte de la población.

    Aun cuando parezca obvio que la mujeres serán las principales clientes, es necesario que segmentes tú mercado meta para diseñar tu oferta en bases a necesidades específicas. Esto no significa que tengas que "olvidarte" de aquellas que no cumplan tu perfil. La idea es comprender bien qué segmentos atendemos y qué segmentos no se han trabajado. Las compradoras difieren en sus deseos, poder adquisitivo, procesos de decisión de compra, y en su actitud hacia la compra. Esto hace necesaria la labor de segmentarlos y así poder evaluar. Hay que dividir los grandes y heterogéneos mercados en segmentos más pequeños y homogéneos, para hacer coincidir las capacidades de la empresa, de sus productos y servicios con los valores que buscan los clientes. 

    De entre todas tus clientas, ¿quiénes son las que te compraran más seguido? ¿Qué características comparten? Tal vez son más jóvenes que adultas. Tal vez son más solteras que casadas. 

    ¿Qué edad tienen? Pero ojo: no son sólo los datos demográficos los que importan. Es vital analizar los psicográficos (estilos de vida y conductas de compra), ya que estos datos nos darán información mucho más detallada sobre la relación de las clientas con nuestro negocio. ¿Cuáles son los valores de estas clientas solteras? ¿Qué hábitos culturales tienen? Pregúntales qué libros leen, qué revistas hojean, qué programas de televisión no se pierden.

    ¿Cuáles son sus patrones de compra? ¿Qué opinan de tu producto y de la competencia? Todas estas preguntas son pautas para que evalúes tu mercado y verifiques que tu producto o servicio se integra armoniosamente a su estilo de vida. 

    No es necesario que inviertas en un estudio de mercado (aunque no estaría de más realizar uno). Lo más importante será que te acerques a platicar con algunos de tus clientes. Así tendrás la mitad del camino recorrido. 

    Debes tomar en cuenta todo lo que te digan, especialmente si son cosas que no quieres escuchar. Tal vez compran tu producto por necesidad y no por gusto. O puede ser que te estén comprando por comodidad o cercanía, no porque realmente prefieran tus productos. Como ejemplo, piensa en los lugares donde comes en horas de trabajo. O en tu manera de decidir a qué cine ir. La mayoría de las personas escogen estos servicios debido a la cercanía o la comodidad, aunque les disguste la opción. Nadie te asegura que tus clientes no te estén usando como su "peor es nada". 

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