El ramo, aún en ciernes, promete crecer como la espuma al amparo de un colectivo compuesto por hombres de 25 a 60 años. El mercado abarca diversos arquetipos de hombre que van desde el típico trendy que lleva una barba de varios días, pero bien cuidada, hasta ejecutivos de alto nivel. Para los últimos un buen corte de cabello, una rasurada impecable, un bigote bien definido y un cutis hidratado son la mejor carta de presentación para las juntas de negocios.
¿Qué les atrae de las peluquerías? Su toque clásico y masculino, que ha sido enriquecido con servicios de spa, como masajes relajantes, tratamientos capilares contra la caída del cabello, limpiezas faciales, hidratación post-afeitado, manicure y pedicure. Con ello, se abre paso un nuevo estilo de peluquerías, donde el hombre puede acceder a un amplio portafolio de servicios, que tienen como eje el corte de cabello y la tradicional afeitada con brocha y toalla caliente.
La inversión inicial depende del tipo peluquería, una peluquería básica requiere de una inversión entre $40,000 y $60,000 pesos y una peluquería/barbería de lujo puede oscilar entre $500,000 y $800,000. El margen de utilidad a los tres años de operación puede ser de hasta 40 por ciento.
Una peluquería tiene un espacio natural en zonas de negocio, colonias de nivel económico medio o alto, y en colonias tradicionales como Roma, Polanco, Condesa, Cuauhtémoc y Juárez, en la Ciudad de México. Zonas como ésas son transitadas por clientes en potencia, como ejecutivos y oficinistas. Las personas que habitan o frecuentan estos barrios, generalmente son impulsores de tendencias en materia de consumo, por lo que no está de más insistir hasta dar con el local ideal.
Las peluquerías son uno de los giros más tradicionales en la industria de la belleza y están resurgiendo en ciudades como Londres, Chicago, Nueva York, Madrid y Barcelona. ¿Qué pasa en México? Hay una nutrida red de establecimientos de barrio, aunque pocos cuentan con ese toque chic que buscan los consumidores de hoy.
De acuerdo con la Cámara Mexicana de la Industria del Embellecimiento Físico (Camief), en México hay más de 96,000 salas de belleza, peluquerías, estéticas, clínicas de belleza, centros de belleza, cabinas de faciales y corporales, centros de aplicación de uñas, ateliers de maquillaje, establecimientos de depilación láser y spas. Todos están clasificados como micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes).
La facturación total del sector asciende a $14,400 millones anuales de pesos y, tras un crecimiento de 5.6% en los últimos 5 años, se espera un despunte de 7.2% en los próximos años. El principal motor de desarrollo es la creciente cultura de la belleza y del cuidado personal, la cual ha permeado a niveles insospechados.
Por ejemplo, ¿sabías que un hombre de buena apariencia sólo tiene que mandar cinco currículos para conseguir una entrevista de trabajo, mientras que uno menos agraciado tendría que enviar mínimo 11 para obtener una cita en Recursos Humanos?Por lo menos, eso es lo que asegura una investigación realizada por un grupo de economistas de la Universidad BenGurión, en Israel.
En cortes de cabello los mexicanos gastan 9 mil 274 millones de pesos al año.
Según la encuesta Nacional de Gastos e Ingresos de los Hogares que elabora el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), en promedio cada familia invierte 742 pesos en su cabello anualmente, lo que representa 0.4 por ciento de su gasto total.
Hay clientes que asisten una vez al mes para corte de cabello y varias veces por semana a rasurarse o a delinear barba o bigote. Mucho tiene que ver el tema de la competitividad y la importancia de la buena imagen personal en ciertos ambientes.
¿Cuánto invierten los hombres en su apariencia? Eso depende de las expectativas de cada individuo y, por supuesto, de la capacidad de su bolsillo; pero es un hecho que es un tema que les interesa. Como referencia basta mencionar que México es el tercer mercado cosmético más grande del continente –sólo después de Estados Unidos y Brasil–, con ventas por US$9,100 millones, según datos de la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos (Canipec).
A decir de ese organismo, la categoría de producto más importada en 2011 fueron las navajas y máquinas para afeitar, sólo después de productospara la piel y antes que las aguas de tocador. Frente a este panorama, vale la pena explorar las oportunidades que ofrece el sector para emprendedores interesados en invertir en la industria de la belleza y en los nuevos modelos de peluquerías.
La ubicación, sobre todo en los negocios que dependen de la visita recurrente de clientes como son las Peluquerías, es uno de los factores clave del éxito. Para que puedas tomar la mejor decisión, sigue estos cuatro consejos y aprende a elegir el mejor lugar.
Otros Consejos para no fallar en la instalación de tu negocio son:
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